miércoles, 8 de febrero de 2012

Alejandro Sanz, padre de un proyecto humanitario


Las enfermedades y las tragedias que ocurren en el mundo no son un tema menor para Alejandro Sanz que se volcó de lleno a su ayuda a Médicos sin Fronteras con los que ha decidido colaborar permanentemente. En diciembre salió a la luz “Generación positiva, voces para un futuro sin SIDA” junto con otros artistas como Antonio Carmona, Juan Luis Guerra, Andrés Calamaro,  Carminho, Carlos Vives, Estrtella Morente, el productor Javier Limón, Estrelle, entre otros.
“Me fui a Zimbabwe, en África, con Médicos sin Fronteras  y acabo de terminar el disco que primero salió de forma digital y semanas después en su forma física.  Mezclamos la música nuestra para recaudar dinero para los niños con sida”, declaró el español. Tras colaborar en la iniciativa “Pastillas contra el Dolor Ajeno” con las que se recaudaron 1.000.000 de euros, que acaba de relanzarse, ahora Alejandro impulsó este trabajo en una causa noble.
“Soy un mercenario de las causas sociales. Decidí no hacer una fundación, sino poder dedicarme a diferentes proyectos que me pareciera que estaban en buena dirección”, recalca. Pero, con todo lo programado y pensado para esta oportunidad ¿cómo fue que se le ocurrió hacer este trabajo? “Mi amigo Javier Limón, quien es mi productor, se fue a Zimbabwe con Médicos sin Fronteras, montamos un miniestudio y grabamos lo que hemos cantado, quedó muy bello y nos hemos dado cuenta que toda la música viene de África”, dijo Sanz del material que forma parte de las labores de la organización Médicos Sin Fronteras.
Más allá de eso, también se sumó a iniciativas de otras fundaciones. “Si hay alguien detrás que tenga esa convicción y sea tan auténtico en su amor por lo que está haciendo, siempre van a poder contar conmigo”,  dijo hace poco en México respecto de Marco Ferrara (director de la fundación “En Nuestras Manos”). Es una institución en la que Sanz se mostró muy comprometido.
“En nuestras manos” tiene como misión capacitar a adultos de comunidades marginadas para que aprendan un oficio y tengan un trabajo digno; educar a los niños de estas comunidades creando escuelas y bibliotecas y con la capacitación continua a los maestros. Centran su actividad en Centros de Atención Integral, dando apoyo a la Infraestructura Educativa y Capacitación Docente y a través de sus Bibliotecas Virtuales.

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